“Sale de contrabando más de un millón de sacos solo para Guatemala, es tiempo de ponerle un hasta aquí a una situación que daña tanto la economía de la institucionalidad cafetalera y del país en general”, señaló el presidente de la Central de Cooperativas Cafetaleras de Honduras (La Central), Dagoberto Suazo.

Señaló que esta cantidad de quintales de grano aromático salen de contrabando cada año hacia Guatemala y en menor cantidad hacia El Salvador y Nicaragua denunció ayer la dirigencia de una de las gremiales del Instituto Hondureño del Café (Ihcafé). El dirigente también solicitó a las autoridades que actúen como seguridad y con responsabilidad jueguen su papel para el cual fueron contratadas.

La cosecha 2019/20 finalizada el pasado 30 de septiembre, cerró con una exportación de 7.17 millones de sacos de 46 kilogramos, ese volumen generó divisas por 896 millones de dólares con un precio promedio de exportación de 124.96 dólares por quintal.

Considerando esa cotización el contrabando asciende a 124 millones de dólares más de 2,900 millones de lempiras. “Uno lo que se imagina es que las autoridades están coludidas, son millones de dólares los que se mueven entre intereses fuertes”, refirió Suazo.

La actividad ilegal que consiste en comerciar producto sin pagar los impuestos correspondientes, en especial impuestos aduaneros, es permanente insistió la fuente.

Por su parte, el pequeño cafetalero Yury Alvarado de Intibucá indicó que el contrabando no es ninguna novedad en Honduras debido a múltiples factores que cada año enfrentan los productores. “El fenómeno de contrabando significa que los precios están mejores en Guatemala, deberían de tomar en cuenta ese factor, por cada quintal que sale, son impuestos que se pierden en Honduras”, expuso Arévalo.