Mujeres lencas destacan en la agricultura
A sus 64 años de edad, Aida Aguilar, madre soltera de 10 hijos, y una socia muy activa en el Grupo Flor del Café FLORDECA, que es una asociación de mujeres productoras que cuenta con 18 socias. Su nivel de liderazgo destaca en la comunidad de Arenales, en el municipio de Chinacla, La Paz, en donde se le conoce como una mujer que enfrenta los retos con valentía y coraje.
Hoy, Aida trabaja junto a su familia en su finca, con machete en mano, realizando las mismas tareas que los hombres y llevando adelante las tareas domésticas. Es socia fundadora de su organización comunitaria, en donde ha ocupado puestos de liderazgo en la Junta Directiva Regional de la Red de Comercialización Alternativa Red COMAL. En su parcela diversificada, produce café, hortalizas, naranjas y además cultiva plantas medicinales.
Su ejemplo representa un cambio de paradigma en una comunidad donde no ha sido común el protagonismo de las mujeres. El esfuerzo de organizarse y la conformación de asociaciones de productores y productoras les ha brindado la oportunidad de tener un rol más activo dentro de la comunidad.
“En las asociaciones le enseñan a uno que tiene que participar. Anteriormente solo los hombres quedaban en las directivas, ahora en los patronatos hay más mujeres que hombres, en comités de agua hay más mujeres que hombres. Le estamos dando vida al valor de la mujer, este es un proceso”, comentó, Aida.
La Red COMAL, apoya a mujeres como a Aida a adquirir la capacitación y la experiencia necesarias para iniciar y aplicar en su finca prácticas agroecológicas y tecnologías de adaptación al cambio climático.
Ella habla del gran valor añadido en sus ingresos al haber implementado dichas prácticas para renovar su finca y estructurarla bajo el enfoque de producción agroecológica. En esta oportunidad las acciones han sido apoyadas por el proyecto Gestión del Conocimiento para la Adaptación de la Agricultura Familiar al Cambio Climático – INNOVA AF, iniciativa impulsada por el Instituto Interamericano para la Cooperación para la Agricultura (IICA), financiada por el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA).
“Con este proyecto he aplicado sistema de micro riego, tanque y filtro de reutilización de aguas grises, también se nos brindó asistencia técnica al grupo de mujeres FLORDECA en los temas sobre preparación del suelo para la siembra, cómo combatir las plagas que afectan el crecimiento de los cultivos, preparar abonos orgánicos, diversidad de plantas aromáticas y medicinales, y potencializar la preparación de medicina natural”, explicó.
“El aprendizaje es lo mejor que nos ha dejado la Red COMAL, nos han enseñado cómo cuidar el suelo con abono orgánico para que entre más años pasen, la tierra tenga más nutrientes”. “Aquí sembramos de todo. Aquí tengo limón, naranja dulce, aguacate, plátano, ayote, cebolla, maíz, menta, hierva buena y muchas plantas más … En las capacitaciones nos enseñaron que lo que uno produce, ya no lo tiene que comprar”, afirmó, Aida.