Los productores lácteos de los Estados Unidos llegaron a la COP28 para mostrar a la comunidad internacional las contribuciones que el sector está haciendo a la seguridad alimentaria mundial y los pasos que ha dado para reducir su impacto ambiental.

Nicholas Gardner, Vicepresidente Senior de Sustentabilidad y Asuntos Multilaterales del Consejo de Exportadores Lácteos de Estados Unidos (USDEC), contó que el sector ve a la Conferencia de Naciones Unidas sobre Cambio Climático como un foro en el cual la agricultura está siendo cada vez más importante.

“A pesar de que se habla mucho de agricultura e incluso se discuten políticas agropecuarias en las negociaciones climáticas, el sector no estaba sentado a la mesa de discusión hasta hace poco tiempo. De manera que los productores de los Estados Unidos, representados por el USDEC, decidimos tener una voz aquí y valoramos de manera especial la tarea de posicionamiento que está realizando el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA)”, contó Gardner.

El productor participó en distintos eventos que tuvieron lugar en la Casa de la Agricultura Sostenible de las Américas, el pabellón que el IICA instaló en la COP 28 junto a sus 34 Estados Miembros y sus aliados estratégicos del sector privado.

“Vemos que hay crecientes desafíos para la producción animal. Hay sectores que desean quitar la ganadería de los sistemas agroalimentarios, de manera que es imprescindible que estemos aquí para contar todo el trabajo que estamos haciendo para reducir nuestro impacto ambiental y, al mismo tiempo, sostener la seguridad alimentaria y nutricional del planeta. También buscamos poner en agenda el rol del comercio internacional como una herramienta clave para erradicar el hambre y hacer más sostenible la producción”, afirmó.

Principios en materia ambiental

Según contó Gardner, en 2020 el sector lácteo fijó tres principios rectores en términos climáticos. El primero es alcanzar la carbono-neutralidad; el segundo es mejorar la calidad del agua a través de un buen manejo de los nutrientes y el tercero es reducir el uso del agua y aumentar el reciclaje.

“Nos fijamos estas metas –explicó-.  Sabemos que las conseguiremos si ponemos el foco en la productividad y la eficiencia y priorizamos las nuevas tecnologías y las prácticas novedosas. Es muy importante que midamos y reportemos nuestros avances. Estamos convencidos de que el cuidado ambiental puede garantizarse al mismo tiempo que se obtiene mayor productividad”.

Gardner dijo que el IICA ha sido un socio muy importante para los productores lácteos estadounidenses en muchas formas: “Le ha dado voz a los agricultores, ha promovido la agricultura sostenible y ha rescatado la importancia de la ciencia para hacer las transformaciones que ya están en marcha. El IICA es de gran ayuda para aumentar el perfil de la agricultura en el debate ambiental, porque lo que dice el IICA es escuchado. Reconocemos su rol en defensa de la ganadería y en dar una sola voz al sector agropecuario de la región que incluya todo el continente”.