En 2019 Honduras vendió a Estados Unidos más de 34.500 toneladas de tilapia, con lo cual mantuvo el primer lugar en la exportación de filete de pescado en fresco al mercado norteamericano, adonde el producto es transportado por vía marítima y aérea. También se exporta su piel a Eslovaquia, Francia e Italia para las industrias farmacéutica y de cosméticos, así como escamas a países asiáticos. La actividad generó 65 millones de dólares en divisas, 2 mil empleos directos y 10 mil indirectos.

En Honduras, concretamente en la zona del golfo de Fonseca, en el borde meridional del país junto al océano Pacífico, se ejecuta el proyecto SurCompite, entre cuyos focos está precisamente la cadena de valor acuícola. La iniciativa busca promover el desarrollo económico de esta región, una de las más rezagadas del país, contando para ello con el apoyo financiero del Banco Interamericano de Desarrollo (BID/Lab), la Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación COSUDE  y la asistencia técnica de la Fundación para el Desarrollo Empresarial Rural (Funder), organización hondureña sin fines de lucro.

Una de las experiencias apoyadas por SurCompite en la región es la de Finca Grupo Ideal (FGI), negocio familiar dedicado a la producción de tilapia roja, que figura entre las especies de interés comercial de este pez. La empresa está localizada en las inmediaciones de la represa José Cecilio del Valle, en la jurisdicción de los municipios de San Antonio de Flores, del departamento de Choluteca, y de La Venta, del departamento Francisco Morazán, donde opera con dos kilómetros de espejo de agua, en asociación con un grupo de pequeños productores locales. En el año 2019 cosechó 182 mil libras de tilapia (unas 82 toneladas) para el mercado de Tegucigalpa, restaurantes y hogares de los municipios cercanos. Con ello marcó un aumento en su producción de 100% respecto del año 2017 y fue la consagración de un negocio exitoso en la comercialización de tilapias.

El crecimiento constante experimentado por FGI desde 2017 es parte de la estrategia de intervención del proyecto SurCompite, que busca convertir a la región modelo del golfo de Fonseca en un espacio para los negocios inclusivos que operan en la cadena de valor acuícola, así como en la hortícola y turística, por su alto potencial para desencadenar un rápido efecto demostrativo y la posibilidad del alineamiento entre los actores públicos y privados.

Cooperando para crecer

El esfuerzo individual de FGI y algunos apoyos que recibió por cinco años de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) permitieron que la empresa se mantuviera a flote. Se dedicaba solamente al engorde de la tilapia, con alevines que traía de diferentes zonas del país.

“Fue con la llegada de SurCompite y Funder que arrancamos con productividad y rentabilidad sostenida”, cuenta la administradora y socia de la empresa, Lesbia Núñez.  La ayuda consistió en implementar una serie de innovaciones que eran necesarias para lograr el dinamismo productivo y comercial de Finca Grupo Ideal, acompañada de asesoría especializada y fondos de BID Lab -el laboratorio de innovación del Grupo BID- y de la Agencia Suiza para Desarrollo y Cooperación (Cosude), que apalancaron el acceso al crédito.

El proceso metodológico de reconversión productiva y mercadológica de Finca Grupo Ideal consideró cinco etapas sucesivas. En primer lugar, se hizo el análisis “Marco de competitividad de la cadena agroalimentaria acuícola”, donde se describió la problemática del rubro en la región y en el país, principalmente la deficiencia en las organizaciones de los productores y la carencia de servicios especializados.

Valor agregado

La segunda fase contempló un estudio de las organizaciones de productores, empresas y emprendimientos acuícolas, para identificar sus debilidades y fortalezas internas y cómo se encadenan con otros negocios similares, con proveedores y con los agentes del mercado. Ese conocimiento habilitó para continuar con la siguiente etapa, orientada a la reorganización de FGI, la capacitación y la implementación de técnicas productivas más eficientes, de manera de optimizar la producción en las plantas de procesamiento, generar nuevos productos de calidad y con mayor valor agregado. El quinto y último paso fue la apertura de mercados, sobre la base de una alta calidad, mejores precios y tiempos de entrega oportunos.

El apoyo de SurCompite a la modernización de la Finca Grupo Ideal incluyó el mejoramiento de su infraestructura de procesamiento: se instaló un sistema eficiente de abastecimiento de agua potable en los cuartos de procesamiento, se revistieron de cerámica los mesones de degüello y el descamado automatizado, así como mejoras en la cadena de frío para conservar el producto -proveniente de las 64 jaulas que tiene la empresa- hasta el momento en que es comercializado.

La modernización de las instalaciones y la reestructuración de los procesos para garantizar la calidad de la tilapia impactó en un aumento de la productividad de los colaboradores en planta. En efecto, el acceso a agua potable por tubería hizo más eficiente la limpieza de los pescados, con la consecuente reducción del tiempo necesario para limpiar cada unidad, y el revestimiento de cerámica facilitó la limpieza del cuarto de procesamiento. La construcción de nuevas entradas a la finca, incluyendo muros perimetrales y accesos vehiculares, mejoró sustancialmente las condiciones de trabajo y el flujo de atención a los vendedores independientes que llegan en motocicleta a adquirir el producto.

En total, las inversiones para mejorar en la planta procesadora sumaron sobre 440 mil lempiras, algo más de 18 mil dólares, financiados en un esquema público-privado: 52% provino de fondos propios de la empresa, 43% fue aportado por el programa SurCompite y Funder y 5% por la red de pequeños productores favorecidos con el encadenamiento.