Mejores capacidades se han desarrollado en la organización Aceites del Norte, ubicada en la comunidad de Puerto Castilla, Trujillo, Colón, a 150 metros de la bahía de Trujillo y al este a 1 km de la laguna de Guaimoreto. Los socios habitan y tienen sus unidades productivas en las zonas de amortiguamiento de ambas regiones protegidas.

Aceites del Norte está integrada por 57 socios: 30 son mujeres y 27 hombres, de los cuales 13 son jóvenes, 5 mujeres y 8 hombres. Cabe destacar que entre los socios se desglosa la etnicidad: 4 misquitos, 7 garífunas y 46 mestizos.

Su objetivo se destaca en adquirir la fruta de coco a socios y no socios, para extraer el aceite y comercializarlo con una empresa nacional. Cabe destacar que, a través de la actividad Conservando Ecosistemas Costeros – CEC, se realizó una jornada de capacitación y práctica en la elaboración de productos de higiene personal y cosméticos, en donde desarrollaron habilidades como la elaboración de shampoo, acondicionador, crema para peinar y crema corporal; todos estos productos son derivados del aceite de coco.

Por otra parte, en alianza con el Instituto de Formación Profesional – INFOP, desarrollaron durante dos semanas en jornada completa la formación en Dulcería, aprendiendo a elaborar conservas, mermeladas, galeras, leche condensada, dulce de leche y confites del gabazo de coco.

El compromiso de la organización es continuar contribuyendo al desarrollo sostenible de su comunidad costera, a través de la cadena de Emprendedurismo, fomentando nuevos ingresos por medio del valor agregado en diversos productos, garantizando una mejor rentabilidad y utilizando el gabazo de coco como materia prima.

“Gracias a Funder hemos logrado aprender a elaborar estos productos, generando nuevos ingresos, crecimiento y diversidad de productos derivados del coco a la organización; es un plus y de mucho beneficio para Aceites del Norte”, agrega Blanca Solis, socia del grupo.

FUNDER realiza estas acciones, siendo importantes al vincular todas las cadenas de valor, las cajas rurales, las empresas, para hacer una labor adecuada en favor del mejoramiento económico, la adaptabilidad, además de contribuir sustancialmente a mejorar los sistemas productivos.

Sin duda alguna, este gran avance es a través del CEC, el cual es financiado por la Agencia Internacional de Desarrollo del Gobierno de los Estados Unidos-USAID y ejecutado por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza-UICN en alianza con la Fundación para el Desarrollo Empresarial Rural-FUNDER.