Formación unida a necesidades del mercado
- Colocar a los jóvenes en un empleo se convirtió en la lógica de ProJoven, en base al mercado laboral, así como el fomento del emprendedurismo juvenil.
- El Programa en sus 9 años de ejecución apoyó a más de 22 mil jóvenes por medio de formación técnica profesional, inserción laboral y emprendedurismo.
El Programa ProJoven que es financiado por la Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación, COSUDE e implementado por Swisscontact, que por 9 años ha apoyado a más de 22 mil jóvenes en riesgo de exclusión en varias regiones de Honduras, por medio de la formación técnica profesional, la inserción laboral y el fomento de emprendimientos.
El Programa inició su primera etapa en el año 2014, basado en la necesidad que tiene el país de formación técnica que facilitará su desarrollo económico y social, en rubros como: construcción, turismo, servicios, así como en los sectores agroindustriales, de cacao, marañón y palma africana.
German Chávez, de origen colombiano, se desempeñó como jefe de ProJoven por más de 3 años, en su reciente visita al país, indicó que el Programa le apostó fuertemente al tema de formación de los jóvenes en alianza con el Instituto Nacional de Formación Profesional INFOP, mejorando las curriculas profesionales dentro de la institución, pero también en la adecuación de espacios de formación, para que tuvieran las condiciones adecuadas para el éxito del proceso de aprendizaje.
Resaltó que “la formación técnica, debe responder a las necesidades del mercado, desarrollando competencias en los trabajadores, empleados formados, especialistas en ciertas ramas técnicas, en ciertos servicios, en diversas ramas que contribuyan al desarrollo económico del país”.
Inserción laboral
Chávez explicó que de nada servía formar jóvenes en alfabetización tecnológica: uso de programas como Word, Excel, Power Point, así como encender una computadora y hasta certificarlo, si eso no garantizaba que el joven obtendría el empleo.
“Si el principal indicador es el empleo, entonces, había que hacer la formación profesional de acuerdo a ese indicador de empleo, no más”, afirmó Chávez.
Sistema de información
Explicó que el Programa en sus inicios no contaba con un sistema de información, eso los llevó a crear uno que les permitiera llevar los registros y los logros obtenidos durante el proceso.
Otro de los logros obtenidos durante la primera fase del Programa, fue fusionar los dos componentes: los talleres populares para atender a los jóvenes en sus comunidades y los centros de formación a los cuales eran llevados para buscar su especialización, eso permitió un solo tipo de formación, tanto para los jóvenes de escasos recursos como para los de las ciudades en donde existían los centros de formación.
“No puede haber educación de pobres para pobres, sin ninguna supervisión, sin orden, nadie respondía por el tema, no podía haber una formación de mala calidad y otra de buena calidad. Para eso se decidió que una sola persona se encargaría de las capacitaciones, otra de la identificación de necesidades y otra de los resultados”, afirmó.
Marca ProJoven
ProJoven se convirtió en una marca de respeto al posesionarlo como una marca de excelencia en la formación de jóvenes y en lograr la inserción de jóvenes en riesgo social.
De acuerdo a Chávez, en la formación profesional ProJoven se planteó el enfoque Psicosocial, donde el joven es la esencia del programa y ha sido clave en el proceso de formación e inserción laboral.
“El joven es el factor de cambio. No es al instructor, no es al ambiente, no son los equipos, es el joven que estábamos formando, entonces, eso es lo que nos impulsa hacer algo muy bonito, realmente fue para mí, en tres años y medio, una experiencia brutal”, dijo muy emocionado.